Los docentes de la Provincia de Buenos Aires vienen de realizar varios paros masivos junto a los trabajadores estatales, reclamando aumento de salarios, comenzando así a transitar el camino de la unidad que se necesita para ganar.
Frente a estos justos reclamos, el gobierno respondió con una provocación, ofreciéndoles un miserable "aumento" del 7%. ¡Para colmo de males, en negro!, argumentando que no hay plata para salarios, para salud y educación…
¡Dicen esto, al mismo tiempo que continúan gastando millonadas para subsidiar a las grandes patronales y para pagar la deuda externa!
Lamentablemente los dirigentes de Suteba y la FEB, en vez de ubicarse a la altura de las circunstancias, continúan respondiendo de "contragolpe", negándose a poner en "pie de guerra" al conjunto de los trabajadores de la educación, impulsando un verdadero plan de acción, coordinado con el resto de los trabajadores estatales y llamando a toda la comunidad educativa a apoyar el reclamo.
Las bases docentes tienen que hacer lo contrario, empujando la continuidad y la unificación con los trabajadores estatales, exigiendo un aumento de emergencia de $600 al básico, mientras continúan reclamando los $1500 y un salario básico igual a la canasta familiar.
Los dirigentes de todas las seccionales docentes opositoras, las agrupaciones y corrientes que se reclaman combativas, los delegados y activistas independientes, deberían convocar a una amplia reunión que sirva para avanzar en ese sentido, de manera de evitar que la lucha quede en manos de los burócratas conciliadores.
Los trabajadores y el pueblo y los luchadores en general deben rodear de solidaridad la lucha de los docentes y estatales, porque si ellos triunfan, todos los que luchan por aumento de salarios y por otras reivindicaciones estarán en mejores condiciones para torcerle el brazo a las patronales y al gobierno.
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